Hoy nos ha visitado una mamá que es magistrada en la Ciudad de la Justicia de Zaragoza. Hemos tenido la oportunidad de conocer muchas cosas sobre el mundo de la judicatura. Primero, que hay que estudiar muchísimo pero que, si te gusta esa profesión, se puede conseguir, como lo hizo ella. Que los jueces en España no utilizan la maza, pero sí que es obligatoria la toga para celebrar un juicio. Que los niños hasta los 14 años no pueden ser juzgados, pero que a partir de esa edad hasta los 18, es un juez de menores quien se encarga de administrar justicia. Que todos podemos formar parte de un jurado popular. Que el símbolo de la justicia es una mujer con los ojos tapados que tiene en una mano una espada y en la otra una balanza.
Ha sido una visita muy interesante y hemos aprendido muchas cosas que no están en los libros.
La balanza representa simbólicamente la igualdad ante la ley y la «justa» medida que ha de tomar el juez.
La espada representa la fortaleza o firmeza de la decisión que ha sido tomada.
Por último, los ojos tapados representan el valor de la imparcialidad. La justicia no se detiene a mirar el origen o la posición social de cada quien, sino que determina lo que es correcto de acuerdo a las leyes. De allí proviene el dicho popular que reza: «la justicia es ciega».